En un operativo de tránsito en la capital salteña el Arzobispo confesó haber tomado alcohol porque “venía de cena”. Lo dejaron igual. El privilegio de ser religioso.

Un verdadero escándalo se conoció en la madrugada de hoy, cuando empezó a circular por las redes sociales un video en el que se ve a Monseñor Mario Cargnello en su automóvil, en un operativo de Tránsito, circulando sin carnet de conducir y alcohol en sangre. Doble vara en los inspectores de la secretaría de Transito que conduce el polifuncional Matías Assennato.

En el video se lo ve a Cargnello haciéndose el que buscaba su licencia de conducir en el auto, hasta que reconoce que no lo tenía. Inmediatamente, y ante la consulta del inspector del operativo, que se llevó a cabo en inmediaciones de la cancha de Gimnasia y Tiro, el “religioso” reconoce también que estuvo bebiendo porque “venía de una cena. No voy a negarlo, no voy a mentirle”, asumiendo la falta, pero sin entrar en el pecado de la mentira.

Allí es cuando los inspectores del municipio que conduce Emiliano Durand actúan con doble vara, ya que lo dejan ir. “Vaya nomás. Evitemos eso”, le dijo el funcionario municipal. “Tengo que ir a una misa”, le respondió Mario Cargnello.

Este escándalo se da en el contexto de un crecimiento de siniestros viales en toda la provincia. Una de las principales causas tiene que ver con el aumento de conductores que circulan con alcohol en sangre. En los operativos los inspectores no tienen ningún reparo en hacer el test de alcoholemia, hacer la multa y secuestrar los vehículos, según corresponda.

Por eso esta vez aplica la llamativa doble vara y del privilegio de ser una persona pública y que debería dar el ejemplo en una sociedad que se torna cada vez más violenta y donde se detectan cada vez más consumo de alcohol y drogas.