El Gobierno inició la privatización de Nucleoeléctrica Argentina: el Estado mantendrá el 51%

A un mes de que se autorizara el proceso, el Ministerio de Economía instruyó a la Secretaría de Energía a concretar la venta del 44% del paquete accionario. Hay un 5% que quedará en manos de los trabajadores.

El Gobierno inició la privatización parcial de Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima (NA-SA), un mes después de que se autorizara el proceso. Así, se implementará un «programa de propiedad participada» por el 5% del capital accionario de la empresa, que quedará en manos de los trabajadores, y la venta del 44% de las acciones en bloque mediante una licitación pública de alcance nacional e internacional, mientras que el 51% se lo quedará el Estado.
 
La medida se implementó a través de la Resolución 1751/2025 del Ministerio de Economía, publicada este jueves en el Boletín Oficial con la firma del titular de la cartera, Luis Caputo.
 
«La empresa no da pérdidas, es superavitaria y la calificamos como estratégica, impulsando el desarrollo industrial y promoviendo el trabajo argentino», sentenció Andrés Kreiner, secretario general de la seccional Buenos Aires de la Asociación de Profesionales de la CNEA y la Actividad Nuclear (APCNEAN), en diálogo con C5N.com.

«Privatizar NA-SA, entonces, no tiene ninguna justificación ni económica ni técnica y no va a mejorar las condiciones de vida de la gente», remarcó, y explicó que en el caso de incrementar las ganancias de un inversor privado, se deberá incrementar la tarifa, con lo que «toda esta aventura la vamos a terminar pagando todos».

Para Kreiner, uno de los motivos es «hacerse de dólares, que el Gobierno necesita desesperadamente para mantener el dólar barato, que es irresponsablemente electoralista y cortoplacista», como también «transferir un negocio al sector privado», ya que para el físico es un «negocio redondo que se monta sobre un sistema exitoso construido por el Estado».

En esta línea, también es un objetivo «coartar en buena medida la capacidad independiente de desarrollo nuclear que la Argentina logró hace muchas décadas, la Argentina eligió una línea tecnológica que es la línea de uranio natural y agua pesada», argumentó el físico, en el caso de que avance un inversor con más del 44% accionario podría decidir cambiar la línea tecnológica.